Conejo al horno

El sábado estuvimos comiendo en Casa Doly mi madre y yo.Es un restaurante que tiene género de gran calidad , vinos maravillos, pero luego le pierden los detalles. Como por ejemplo,el pan, las guarniciones y la limpieza de los baños, aunque en ésto último han mejorado algo con los años, que no es poco.
Tomamos tellinas, algo arenosas, gambas a la plancha, y un par de nécoras como entrantes. De segundo un rodaballo al horno que llegó a la mesa tan crudo que no podíamos cortarlo. Lo trajeron de vuelta de la cocina ya pasado. Siempre igual. Viene con guarnicion de patata, cebolla y tomate, asados con el pescado, pero el tomate completamente verde. En fin, detalles.

Y el dominguito nos fuimos las dos a ver el partido del Rayo Vallecano al estadio.No es que nos guste en especial el futbol, pero verlo en el estadio es cosa siempre divertida. Además las entradas nos las regalaron que también es un aliciente.
Allí estábamos las dos dando palmas, cantando y mi madre dirigiéndolo todo.
- !Niño, pero pasa la pelota!. Pero si está corriendo sólo con el balón a la portería, pobrecito.
Hija, dicen muchas palabrotas ¿no?
Me decía refiriéndose a la hinchada, cuando al rato la veo con los hombros alzados y tapándose la boca con la mano.Mi madre perdiendo la compostura ¿Qué has dicho máma?
-Ay, es que le han agarrado de la camiseta.

Según mi madre el hecho de que nuestro portero estuviera casi todo el partido adelantado ,hasta casi el centro del campo, era porque no sabemos jugar bien.
- Porque, hija, ¿y si van los contrarios y tiran y él no está en la porteria? Le meten un gol.
-Mamá es que no les dejan pasar de medio campo.
-Que no, Marisa, que no , que no saben jugar bien.

El Rayito empató el partido, que necesitaba ganar, y nosotras nos fuimos bien desahogadas a tomar unas cevecitas a los soportales.

Este conejito es una delicia, sencillo y barato.
Necesitamos:
Un conejo cortado en seis trozos, 1 calabacín pequeño en ruedas, 1 cebolla grande en aros finos, dos patatas en ruedas finísimas, dos tomates maduros rallados, AOVE, dos cucharadas de soja, un vaso de oloroso, pimienta negra molida, tomillo , orégano y sal.
Colocamos por capas todos los vegetales en el fondo de una fuente de horno. Regamos con la soja y el vino. Esparcimos las hierbas por encima .
Salpimentamos el conejo, lo acostamos en esta rica camita y lo abrigamos con un chorreón de AOVE.
Lo introducimos en horno fuerte hasta que esté cocinado a nuestro gusto.
Servir, comer y chuparse los dedos.


Besos