
Dimos un paseo rodeándola y disfrutamos de las bonitas panorámicas .


Jó, ahora que los veo , qué corto se me ha hecho. Estoy deseando verlos de nuevo. Debe ser el mono ese del que hablaba el Zambombo.
Esta reunión tenía el aliciente de que íbamos a conocer a Apicius y a Fausto. Pero nos esperaba la sorpresa de Miguel y Milagros que creo que ya los hemos enganchado al grupo.
Fausto quiere organizar una reunión en Holanda y algunos le hemos animado a que se ponga con ello. Cómo son los gallegos, chusmil años en el extranjero y no pierden el acento.
Después de la vuelta alrededor de la población nos concentramos en la plaza de la iglesia donde se celebraba una boda y allí anduvimos cotilleando un poco, haciendo fotos, tomando cañitas, viendo las carreras en el bar más cercano.
Había una cuadrilla de hombres que iban de bar en bar tocando una especie de acordeón y una pandereta. Sonaban muy bien. Entraban en el tasco , tomaban una ronda, salían cantando. Me parece una muy útil manera de que las señoras de estos hombres sepan por donde andan para así saber en qué momento echar los fideos.
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